ELEGANCIA SALVAJE
Vaginarias-blogspot.com © ; bienvenidos sean todos al mundo de nuestras mentes, un mundo infinito e increíblemente único fusionado con la realidad y los sentidos creando así textos y pensamientos con un tinte claramente subjetivo a modo de expresión libre y claramente artística desde lo humano, hasta lo espiritual.
Nadie puede obligarte a pensar, pero si podemos hacerlo por nosotros mismos y expresarlo libremente de la forma que queramos sin más explicación o excusa alguna, así que nuevamente... bienvenidos a Vaginarias.blogspot.com. Disfrutenlo.
domingo, 28 de febrero de 2010
Ya no parecen lágrimas. Parecen anclas, que me unden cada vez más y más. Son cada vez más pesadas por todo el sufrimiento que llevan consigo. Solo quiero que esto termine, no lo soportaría una noche más. Ya no sé si la vida es larga o corta. Ya no sé si el médico me dice la verdad. Ya no sé qué pasará al despertar. Ya no sé si despertaré. Ya no sé.. no sé si pasaré de esta noche. Tomo mi abrigo , el que me acompañó en cada amanecer camino al trabajo. Mi bufanda, esa que me trajo suerte, supongo - tampoco quiero pensar lo contrario, no tengo lugar para otra decepción -. Guantes. Botas. Paraguas ? Para qué ? Solo quiero sentir la lluovia deslizarse por mi cara, y sentir , que mi niño interior me araña las entrañas por salir. Salgo al vestíbulo. Hecho un vistazo hacía cada lado. Ni un alma en vela se atreve al chaparrón que inunda las calles de la antigua Barcelona. Recorro el mismo camino que recorrí durante 40 años. Me lo sé de memoria. Miro cada baldosa con algo de nostalgia mezclado con melancolía, y me doy cuenta, que voy a extrañar este lugar.. aunque no sé si pueda extrañar. Qué será de mi cuándo mi corazón deje de palpitar ? No hay respuesta, supongo, pero sé que es y será de mi, mientras palpite. Un pobre diablo condenado a vivir a la sombra de aquel patán que me llevó a la ruina. Solo camino, ya no quiero pensar más. Me siento agitado. Disminuyo el paso y decido tomar asiento. Ya nada es igual a lo que recordaba. Ya no soy aquel señor, al que todos respetaban. Que caminaba inspirando respeto y admiración. Ya no camino con una dama del brazo. Ya no soy como antes. Ahora, solo soy un pobre tipo, avejentado por los hechos, y destruído internamente. Con problemas de salud muy graves, migraña crónica de tanto pensar. Solitario, ya nadie quiere de mi companía. Yo supongo que tampoco quiero , pero a veces, la necesito . Solo soy un pobre tipo, tal cual me lo han dicho. La gente ahora me da limosna cuando me ve. Doy lástima. Me doy lástima. Ella ya no quiere verme, dice que nunca la amé. Pobre tonta ! Si supiera un cuarto de lo que yo la quise.. nunca se lo demostré, lo sé, pero .. ella me hizo revivir,y ahora ? Ahora no está. Siento un ruido a mi espalda que me hizo girar bruscamente, y admito, me dio palpitaciones. Já ! Inconcientemente, me senté al portal de su entrada. Esa casa de línes frescas, color blanco y ventanas grises por el hollín, en donde tantas tardes pasé a su lado. Ahora me suena a infierno. Pero la verdad, es que me encantaría tener el valor de tocar a la puerta, mirarla a los ojos y.. decirle todo lo que siento. Me podría ir tranquilo a descansar en paz. El final se acerca, lo siento lento, demoledor. Sin pensarlo, toco a la puerta. Siento sus pasos. Escalofrío. " Quién es ? ". No me atreví a contestar, me quedé helado al oír su voz. Atiné a balbucear algo, pero fue en vano, sentí que me ahogaba y un golpe en el pecho me hizo estremecer. Sentí que lentamente me desplomaba. Me tumbé contra una columna del pórtico. Al oír el estruendoso golpe, ella salió. Ya no podía ver con claridad, y la lluvia me impedía bastante reconocer formas. Pero a ella la reconocí al instante. Un aturdidor zumbido tronaba en mi oído derecho. Sentía como la sangre aparecía. No podía ver. No podía oír. Pero si, sentir. Sentí sus cálidas manos sujetarme el rostro firmemente. Solo alcancé a decir dos palabras, antes de que mi corazón se frenará totalmente. La sentía con pánico, sin saber cómo reaccionar, y no la culpo. Sentía sus manos golpearme lentamente el rostro. Tal vez lo hacía con fuerza, pero yo sentía todo a una velocidad distinta. Abrí los ojos con las últimas fuerzas. La miré. Hermosa, como si fuera ayer cuando estábamos en el altar. " Te amo ". Lo último en mi lista, antes de irme .
¿Cuántos recuerdos quedan en el olvido por la simple ilusión de algo que creemos mejor?
martes, 23 de febrero de 2010
lunes, 22 de febrero de 2010
viernes, 19 de febrero de 2010
CAMPANA
Agosto 23 a Septiember 22
La bondad es el atributo que distingue a los nativos de este periodo del año. Son solícitos y realistas, y habitualmente ocupan lugares preponderantes en la sociedad. Son atentos y poseen una capacidad de crítica que ejercen siempre en forma constructiva, pero exigiendo a veces demasiado de los otros. Usan el dinero para sentirse seguros, pero piensan mucho antes de iniciar un negocio o cualquier transacción comercial.
DAGA
Octubre 23 a Noviembre 21
La Daga es la entrega del gitano cuando el sale de la adolescencia y comienza una vida adulta. Por eso está asociada a la muerte, o sea, los cambios necesarios que la vida nos ofrece para crecer. La persona bajo esta influencia tienen un temperamento fuerte y enigmático, se vuelve irresistible y respetado. Posee una mente analítica, percibiendo todo lo que esta a su alrededor.Siempre procura profundizar en lo que hay a su entorno, sea en el amor o en el trabajo. Ama de manera sensual y arrebatadora.
.
.
.
jueves, 18 de febrero de 2010
Bueno, ya que llegamos a las 100 entradas, creo que este asombroso acontecimiento merece una nueva entrada cursi ( la 102 ) para rememorar viejos tiempos, 101 entradas antes, cuando dabamos comienzo a este espacio con nuestras primer entrada. Bueno, creo que la historia, si mal no recuerdo, es mas o menos asi:
Un día, a la madrugada, si no me falla la memoria, a las 5.30 am aproximadamente, dos grandes amigas - o por lo menos eso cree su fiel servidora, quien les habla- se encontraban algo aburridas mientras hablaban por messenger. Una de ellas, de falso color de cabellos, decidió repentinamente crear este espacio. La otra, algo perturbada por la espontaneidad de su amiga, y algo convencida por la idea, no se negó. Al contrario. Dijo que sí, rapidamente. Primero, discutieron la temática del blog y concluyeron en algo puramente intelectual que els haga explotarse cada neurona para lograr algún texto que llegue a convencer ( más que nada a ellas ) y que demuestre que no son solo dos caras bonitas, si no también, dos grandes mentes pensativas. Si ese pensamiento se hubiera mantenido durante todo el blog, hubiese sido, confieso, muy aburrido . Luego discutieron posibles nombres, que confieso, algunos eran muy malos, pero no niego, que se rieron. Al final, a una de ellas, se le ocurrió un nombre un tantito asqueroso, pero que gustó al instante ( jaja ). Al fin, una de ella publicó la primer entrada, en la que explicaba lo que el blog iba a mostrar: sus mundos . Luego de eso, empezaron a subir textos de sus blogs particulares.. pero luego, todo cambió. Ya no subían solo textos intelectuales. Subían fotos, letras de canciones, y textos divertidos. El blog era pura y exclusivamente el reflejo de ellas, completa y definitivamente, elegancia salvaje ;
Es el día de hoy, en el que el blog representa para ellas un "diario íntimo" en el que escriben cada vez que tiene oportunidad, y plasman ideas, cuentos, historias, consejos, puntos de vistas, se arman debates y suben lo que ellas quieren.
Simplemente, estoy orgullosa de tener el blog con ella, porque es una amiga excepcional y con la que comparto este tipo de cosas. Gracias !
Este es el fin, pero continuará ..
Ich liebe dich ♥
miércoles, 17 de febrero de 2010
En la limitada experiencia de Daisy, ningún hombre se había dirigido a ella con tanta confianza. Era evidente que no sabía nada sobre modales de salón.
—Sólo estoy dando un paseo —balbuceó.
—¿Le enseñó alguien el pasadizo?
Daisy vio cómo Jones apoyaba las manos en la pared, una a cada lado de ella, Era un poco más alto que la media, pero no en exceso, de modo que su cuello moreno quedaba a la altura de los ojos de ella.
—No; lo encontré yo sola —explicó tras inspirar para ocultar su nerviosismo
—. Tiene un acento extraño.
—Y usted también. ¿Es americana?
Asintió con la cabeza, ya que se había quedado sin habla al ver el brillo de un diamante en el lóbulo de la oreja del muchacho. Notó una especie de nudo en el estómago, casi como si sintiera repulsión, y se percató, consternada, de que se estaba ruborizando.
Él estaba tan cerca que ella notaba su límpido aroma a jabón mezclado con olor a cuadra y cuero. Era un olor agradable, una fragancia masculina muy distinta de la de su padre, que siempre olía a colonia y betún, y a billetes de banco nuevos.
Su mirada inquieta recorrió los brazos de Jones, que la camisa remangada dejaba al descubierto, y se detuvo fascinada en la figura que llevaba dibujada con tinta en el antebrazo derecho: un caballito alado de color negro.
Al percatarse, él bajó el brazo para que lo viera mejor.
—Un símbolo irlandés —explicó—. Un caballo de pesadilla llamado Pooka.
El sonido absurdo de la palabra hizo sonreír a Daisy.
—¿Se diluye al lavarlo? —preguntó con vacilación. Jones negó con la cabeza. —¿Es parecido al Pegaso de los mitos griegos? —quiso saber Daisy, y se pegó aún más a la pared.
Jones le miró el cuerpo en una especie de repaso lento que ningún hombre le había hecho antes.
—No. Es más peligroso. Tiene los ojos amarillos como el fuego, da unos saltos que le permiten salvar montañas y habla con una voz humana profunda como una gruta. A medianoche, puede pararse delante de tu casa y llamarte por tu nombre si quiere llevarte a pasear. Si vas con él, te llevará volando por la tierra y por el mar, y si alguna vez regresas, tu vida ya no volverá a ser igual.
A Daisy se le puso carne de gallina en todo el cuerpo. Todos sus sentidos le advertían que pusiera fin a esa desconcertante conversación y huyera de aquel hombre a toda prisa.
—Qué interesante —masculló, y se volvió en busca de la puerta.
Para su consternación, Jones la había cerrado. La puerta estaba muy bien escondida en los paneles de la pared. Asustada, presionó distintos puntos buscando el mecanismo de apertura. Tenía las palmas sudadas apoyadas en un panel cuando notó que el joven romaní se inclinaba hacia ella por detrás para hablarle al oído.
—No la encontrará. Sólo hay un punto que la abre.
Su aliento cálido le acariciaba el lado del cuello y su acento gitano le retumbaba en los oídos y la ligera presión de su cuerpo le daba calor donde la tocaba.
—Entonces ¿por qué no me dice cuál es? —repuso Daisy en su mejor imitación del sarcasmo, aunque le consternó oír que sólo sonaba insegura y perpleja.
—¿Qué me dará a cambio?
Daisy trató de mostrarse indignada, a pesar de que su corazón le palpitaba desbocado. Se volvió para mirarlo y le lanzó un ataque verbal que esperaba lo hiciera retroceder.
—Señor Jones, si está insinuando que debería... Bueno, evidentemente no es usted un caballero.
Él no se movió ni un centímetro y esbozó una sonrisa que dejó al descubierto su blanca dentadura.
—¿Quiere dinero? —preguntó Daisy con desdén.
—No.
—¿Una libertad, entonces? —sugirió tras tragar saliva. Al ver que no la entendía, aclaró con las mejillas sonrojadas—: Tomarse libertades es dar un abrazo, o un beso...
Algo peligroso brilló en los ojos dorados de Jones.
—Sí —murmuró—. Me tomaré libertades.
Daisy apenas podía creerlo. Su primer beso. Siempre lo había imaginado como un momento romántico en un jardín inglés al claro de luna, por supuesto. Y un caballero rubio de cara aniñada le diría algo bonito como un poema justo antes de que sus labios se juntaran. No se suponía que iba a ocurrir en un sótano de un club de juegos con un crupier gitano. Por otro lado, tenía veinte años, y tal vez ya iba siendo hora de que empezara a acumular algo de experiencia.
Tragó saliva de nuevo, luchó por dominar su respiración y contempló la parte del cuello y el tórax que dejaba al descubierto la camisa medio desabrochada de Jones. La piel le brillaba como si fuera de satén ámbar.
Cuando se acercó más a ella, su aroma le anegó la nariz como si se tratara de la fragancia de una especia. Las manos del romaní le sujetaron con suavidad el rostro y se lo inclinó hacia arriba. Mientras le miraba las pupilas dilatadas, llevó la yema de los dedos a los labios y se los acarició hasta que estuvieron separados y temblorosos. Le puso la otra mano tras la nuca para acariciársela y luego apoyarle en ella la cabeza, lo que fue muy oportuno, ya que toda su columna vertebral pareció disolverse como azúcar bajo el agua.
Le puso los labios sobre la boca con una presión tierna para explorarla con suavidad. Ella sintió un placer cálido por todo el cuerpo, hasta que ya no pudo resistir el ansia de apretar su cuerpo contra el del muchacho. Se puso de puntillas, le tomó los hombros con las manos y se le cortó la respiración cuando él le deslizó las manos por el cuerpo.
Cuando por fin Jones levantó la cabeza, Daisy descubrió, avergonzada, que estaba aferrada a él como un náufrago.
Apartó con rapidez las manos y retrocedió todo lo que le permitía la pared.
Confusa y abochornada por su propio comportamiento, lo miró ceñuda.
—No he sentido nada —dijo con frialdad—. Aunque supongo que hay que reconocerle el mérito de haberlo intentado. Y ahora, si me dice dónde está la... —Soltó un gritito de sorpresa cuando Jones volvió a acercarse a ella y se percató, demasiado tarde, de que se había tomado su comentario desdeñoso como un reto.
Esta vez, tras sujetarla por la nuca, la besó con labios más exigentes. Con inocente asombro, notó el contacto sedoso de su lengua, una sensación que la hizo estremecer de placer.
El gitano terminó el beso con una caricia con los labios, la miró a los ojos y la retó en silencio a negar que estaba excitada.
—Nada —dijo ella con voz débil tras reunir el poco orgullo que le quedaba.
Esta vez él la estrechó totalmente contra su cuerpo y la besó con un ardor inusitado. Daisy no se había imaginado que un beso pudiera ser tan apasionado.
La boca de Jones se apoderó de la suya mientras con las manos le sobaba el cuerpo. Notó cómo le separaba los pies con los suyos y aumentaba el contacto de sus cuerpos. La incitó y la acarició con sus besos hasta que ella tembló como un animalito desamparado entre sus brazos.
Para cuando sus labios se separaron, Daisy estaba exhausta, con toda la conciencia concentrada en las sensaciones que la conducían hacia un fin desconocido. Abrió los ojos y lo miro aturdida.
—Ahora ha estado mejor —consiguió decir con temblorosa dignidad—. Me alegro de haberlo conocido. —Se volvió, pero no sin ver cómo él sonreía.
Jones alargó la mano para pulsar el mecanismo oculto y abrir la puerta. Para turbación de Daisy, entró con ella en el pasadizo oscuro y la acompañó escaleras arriba guiándola como si tuviera ojos de gato en la oscuridad.
Cuando llegaron arriba, donde era visible el contorno de la puerta de la sala de lectura, se detuvieron.
—Adiós, señor Jones —musitó Daisy, necesitada de decir algo—. Es probable que no volvamos a vernos nunca. —Ojalá fuera así, porque estaba claro que no podría volver a mirarlo a la cara.
—Tal vez una noche me aparezca en tu ventana —le susurró al oído Jones—. Para tentarte a dar un paseo por la tierra y por el mar. Y si dejas que te lleve, no volverás a ser la misma.
.
.
.
martes, 16 de febrero de 2010
sábado, 13 de febrero de 2010
Duele. La desaprobación, duele. Esa mirada que te intimida, y hasta te hace sentir insignifante e inútil. Lastima. Hiere lentamente. Te pinta de otro color. Te llena de cosas que antes no habías sentido. Hasta ahora te sentías capaz; capaz de hacer cualquier cosa, de crear, de ser ! . Ya no. Esas cosas que nunca habías sentido, son una mezcla de decepción e impotencia. No te asustes. Vení. Vamos a armar de nuevo.
miércoles, 10 de febrero de 2010
martes, 9 de febrero de 2010
- No... no sé - Contestaba ella entre risas.
- ¡Uh, sos una idiota! - esto sólo provocó la risa desenfrenada de su amiga- ¡Cortala!
- No lo puedo controlar.
En ese momento su amiga se levantó del colchón y ennarcó una ceja.
- Esta bien, está bien. - respiró hondo - Me calmo.
- En serio? - Preguntó con sacarsmo.
- Sabés que no. - ¡Pobre mujer! aguantaba la risa para no molestar a su amiga.
Cuando su amiga levantó la mirada y la obvservó toda roja conteniendose, estalló ella en mil carcajadas.
En su respuesta también estalló entre risas...
Quién podría decirlo, una noche lluviosa, sin luz y con el frío como actor principal, aquellas niñas encontraban la felicidad absoluta en el cálido sonido de su amistad, aquella pasada noche de junio.
lunes, 8 de febrero de 2010
Yo sólo hablo del punto de vista artístico y cultural, no de producción, gobierno ni nada que pueda ser manipulado por el llamado capitalismo.
Primero, antes que nada, creo que la belleza y la sabiduría siguen presentes en Argentina, pese a todo lo que ocurre, aunque el gobierno no sea un ejemplo de sabiduría, podemos encontrarla en otros lados. Segundo, no creo que sean totalmente consumistas, creo que intentan de vender algo que sea "muy argentino" para que a la gente le guste y termina por decepcionarla y no mostrarle lo que les hubiese gustado ver. Además, creo que aunque se ponga al mejor actor del mundo, o mejor dicho, mejor actor argentino en una película en la cual su argumento es malo y su producción decadente, no puede mejorarla, por más que el set sea en el luagr más recóndito y bello del país; y si no, ves las críticas, y se pueden notar elogios de los paisajes, pero de lo más importante, del argumento y la producción en si, fuertes críticas sobre lo pésimo que fue.
También creo que si un film se centrara nada más que en las costumbres argentinas, sería hasta un pésimo chiste de mal gusto, porque creo que somos más que eso, somos más que mate y un asado, somos más que un tango y una bandera. Somos todos, y somos todos los pensamientos de todos. No somos solo las costumbres que vendemos al exterior, casi como una sociedad un tanto turisticamente capitalista.
Por último, con respecto a lo del putticlub, yo creo que más que las películas el teatro de revista es un reflejo de un "putticlub". Sin más comentarios,
Agos ;
Admito si que las producciones no son totalemnte las adecuadas y son más consumistas que otra cosa, pero cuando el talento argentino está visible en la tira cinematográfica, la película es excelente!.
Ese asento gaucho de las películas, me llenan de orgullo, los paisajes teñidos por las costumbres, el mate y el asado. El sentimiento e ingenio de un argentino es lo que me impulsan a decir que la cinematografía argentina puede mejorar si se lo propone, centrandose casi únicamente en las costumbres. Argentina cultural tiene mucho para mostrarnos y mostrarle al mundo sólo necesitamos gente capacitada que sepa escucharla y no transformar su esenario en un vulgar putticlub!, sino que saque la belleza y la sabiduría de esta gran tierra que alguna vez fue.
¡Argentina mía demostrá tu arte al mundo una vez más!
Retomando el punto en cuestión, no significa que porque una obra artística o periodística esté en el mercado es verdadera y que su autor posee una clara imagen conceptual acerca de la realidad que lo circunda y de lo que ha creado.
so bre vi ve.
domingo, 7 de febrero de 2010
Cuanta diferencia que hay en el mundo, y a la vez tan poca. Con esto me refiero a que somos todos iguales como personas, pero a la vez tan diferentes. Nos diferencia lo físico. Creencias. Grupos. Política. Economía. Pero al fin y al cabo, somos todos personas que poseemos pensamiento y cabeza para vatirnos por nuestros propios medios. Con todo esto, hoy en día, en el siglo XXI, me da vergüenza ajena admitir que otras naciones se demigre a una persona por su género, por su poder adquisitivo y/o económico, por lo físico y hasta por sus creencias. Estamos en una época en la que la igualdad es una de las cosas que más han avanzado con respecto a lo social, por suerte, y en algunos grupos sociales podemos seguir observando una decadencia a nivel social que asombra demasiado. Los dirigentes de esos pueblos, qué es lo que tienen en la cabeza para no ver que su gente se derrumba moralmente y vive a la sombra del que tiene al lado , injustamente ? Tan cegados por el dinero están, por el poder, que no pueden pretar atención a su gente ? Luego, dicen que aman a su pueblo. Pero por favor. Tanto hipócrita hay hoy en día, qué es lo que le ocurre al mundo ? Qué es lo que realmente le falta en la cabeza a la gente ? Les falta c o n c i e n c i a . La gente es la única que puede ayudar a la gente. Es muy fácil.
lunes, 1 de febrero de 2010
.